Most Popular Books by Cynthia Ozick

Los cuentos reunidos de la gran heredera de Henry James . «Peleo con cada frase, sílaba a sílaba. Bien mirado, escribir es en el fondo un acto de valor.» Cynthia Ozick Al hablar de la condición humana se corre el riesgo de caer en la frivolidad, pero basta con leer cualquiera de los cuentos de Cynthia Ozick para olvidarse de las frases hechas y asumir lo que es ajeno como nuestro. En esta recopilación de cuentos descubrimos a hombres y mujeres que a primera vista podrían parecer seres patéticos, pero que en el fondo conservan y muestran su dignidad, a menudo gracias a la ironía, siempre tan oportuna. Si, como decía Mark Strand, vivir consiste en estar alerta y prestar atención al mundo, Cynthia Ozick, «una de las pocas maestras vivas de la literatura norteamericana» (David Foster Wallace) es el testigo que buscábamos. La crítica ha dicho... «Cynthia Ozick es una escritora de escritores, una especie de George Steiner sin complejos con un toque feminista. Su intelecto se presta a destellos de brillantez.» Ilan Stavans, The Times Literary Supplement «Si hay algo parecido al panteón literario en América, Cynthia Ozick es entonces nuestra Atenea.» Washington Post Book World «Ozick se ha consolidado como una de las escritoras más importantes de nuestra época, con un amplio abanico de exquisitas obras de ficción y bellas letras.» Giles Harvey, The New Yorker «Ozick es la mejor escritora americana de los últimos años. [...] El judaísmo le ha dado lo que el catolicismo le dio a Flannery O''Connor: autoridad, agudeza e indignación.» Edmund White, The New York Times Book Review «Es una escritora con atracción innata por la paradoja y por las cuestiones morales inherentes a las relaciones entre riqueza y pobreza, mente y cuerpo, historia e imaginación.» Ali Smith, The Guardian «Cynthia Ozick es una especie de hipnotizadora narrativa. La variedad de su registro es extraordinaria; aparentemente no hay nada que no pueda hacer.» Johanna Kaplan, The New York Times Book Review «Un cuento de Cynthia Ozick estira el cuello y luego se muerde la clavícula o – entre risillas – se hace un tajo en la garganta. Parece querer castigarse a sí misma por sus propios actos de magia.» John Leonard, The New York Times «Una voz tan neoyorquina como lo fue la de Edith Wharton antes que ella, pero el Nueva York de Ozick es un lugar de suburbios maltrechos, de cavernosos edificios municipales, de antiguos profesores de hebreo que viven encima de tiendas de ultramarinos cubanas, de bibliotecas públicas, amantes astutos y apariciones milagrosas aunque inconvenientes.» Anita Brookner, The Spectator «Tanto si no conoces su obra como si eres un viejo admirador, encontrarás muchas cosas en Ozick que te sorprenderán.» Diane Cole, The Washington Post «El estilo más logrado y elegante de la narrativa contemporánea.» John Sutherland, The New York Times «Cualquiera que haya seguido la carrera de Ozick sabe que es una delicia.» Dwight Garner, The New York Times «Terriblemente inteligente, hasta el punto de que resulta un poco deshumanizante. Cada vez que crees haberla entendido, tras un considerable trabajo, refina su análisis una vez más, subiendo un peldaño más en su escalera hacia alguna perspectiva última. Uno se pregunta, si se saliera con la suya, si la ficción podría sobrevivir a sus exigencias, si no la intimidaría hasta hacerla desaparecer.» Anatole Broyard, The New York Times

Gran admiradora de Henry James, Cynthia Ozick rinde aquí su particular homenaje al autor de Los embajadores con una novela donde el talento está en los detalles. Una mujer de mediana edad parece andar sin rumbo por las calles de París una tarde de calor asfixiante de finales de julio de 1952. Finalmente se sienta en un bar, pide un zumo y pregunta al camarero si por casualidad conoce a un tal Julian. No es la primera vez que lo hace, pero nadie recuerda a ese chico norteamericano, de pelo rubio y aspecto desaliñado, que un buen día dejó su casa de California para viajar por Europa e instalarse en París, lejos de un padre intransigente y una madre que se ha refugiado en la locura para aliviar el deber de vivir. Quien busca y pregunta es su tía Bea, dispuesta a llevárselo de vuelta y hacer de él un hombre de provecho, pero cuando finalmente la mujer descubre el paradero de Julian, habrá algo insólito esperándole: otros cuerpos, otras voces, reclamándole una nueva versión del amor. Lejos de su tierra y abrumada al principio por el desorden que aún arrasa Europa tras la guerra, Bea ahora quiere comprender, y lo que había empezado como un simple viaje acaba siendo una lección de sabiduría. Reseña: «Una novela llena de perspicacia, que Henry James hubiera aplaudido.» The New York Times «Una de las pocas maestras vivas de la literatura norteamericana.» David Foster Wallace

Ruth Puttermesser vive a New York. La sua cultura è monumentale. La sua vita amorosa minima. Preferisce, ad esempio, versare lacrime per Platone che divertirsi con Morris Rappoport, un uomo sposato con cui ha una relazione blanda e molto breve. Ma Ruth ha un dono: le sue fantasie rivelano una sconcertante tendenza ad avverarsi – con conseguenze disastrose per ciò che siamo abituati a definire la “realtà”. La Signorina Puttermesser vorrebbe tanto una figlia, e prontamente, senza aiuto, ne crea una nella forma del primo golem femmina di cui si abbia memoria. Mentre si dà da fare nelle pieghe polverose del dipartimento municipale in cui lavora, sogna di cambiare la città – ed ecco che ne diventa il sindaco. La Signorina Puttermesser riflette sull’aldilà e ovviamente vi si butta a capofitto, solo per scoprire che trovare un paradiso significa anche perderlo. Romanzo dotato di una sconfinata immaginazione e vibrante umorismo, Le carte della Signorina Puttermesser è un vero e proprio luna-park letterario, scritto da una delle autrici più visionarie e limpide del nostro tempo.

Permítanos comenzar con la misma frase que inauguraba la contratapa de Metáfora y memoria: “Existe un amplio consenso en señalar a Cynthia Ozick como una de las más grandes escritoras norteamericanas contemporáneas. Nosotros compartimos esa opinión, allí están sus novelas y cuentos para comprobarlo. Menos conocido es que también es una extraordinaria ensayista”. Pero precisamente después de la aparición de Metáfora y memoria su talento para el ensayo pasó a ser tan conocido en castellano como su arte para las novelas. Comprobado entonces que Ozick es tan fantástica para la novela como para el ensayo, Críticos, monstruos, fanáticos y otros ensayos literarios –su más reciente libro– no necesita demasiada presentación. Tan solo hace falta mencionar que aquí nos reencontramos con su clásica elegancia para la prosa de ideas, sus ironías ácidas frente a los lugares comunes de la época, su gusto por los autores que funcionan como puente entre la tradición centroeuropea y la norteamericana, el humor judío y una erudición asombrosa. La lectura de los ensayos de Ozick solo depara inmensos momentos de placer.

« Je m’appelle Lloyd Wilkinson Petrie, et j’écris, en ce 30 avril 1949, sur ordre des membres du conseil d’administration de l’Académie du Temple-école de garçons. » L’école a fermé ses portes depuis longtemps. Reclus dans son bureau, Petrie rédige ses mémoires sur sa fidèle Remington. Et raconte sa relation avec Ben-Sion Éléphantin, un ancien élève dont le nom lui a valu bien des moqueries. Pourquoi revenir sur ce lointain passé ? Et qu’est-ce qui a bien pu rapprocher ces deux garçons, en dehors de leur passion commune pour les antiquités égyptiennes ? Au fil de ce conte où rôde en permanence une inquiétante étrangeté, on s’interroge sur la fiabilité de ce narrateur à l’esprit troublé. Avec une incroyable virtuosité, Cynthia Ozick nous entraîne à nouveau dans un monde à part, proche des romans de son maître Henry James. Traduit de l’anglais (États-Unis) par Agnès Desarthe.

Selected by Cynthia Ozick from a dozen books written across more than fifty years, the essays and short stories gathered here constitute a summing-up of her remarkable literary career. In such classic essays as "Who Owns Anne Frank?," "What Helen Keller Saw," "Dostoevsky''s Unabomber," and "Transcending the Kafkaesque," Ozick examines some of the world''s most illustrious writers and their work, tackles compelling contemporary literary and moral issues, and looks into the wellsprings of her own lifelong engagement with literature. In her short stories, including "A Hebrew Sibyl," "What Happened to the Baby?," "Dictation," "The Biographer''s Hat," and "The Conversion of the Jews," Ozick demonstrates again and again her stylistic brilliance and the originality of her distinctive interweaving of the strands of history and myth.

A selection of essays by the acclaimed and beloved writer Cynthia Ozick, collected by David Miller.

Os dois contos reunidos neste pequeno volume foram publicados originalmente em separado, na década de 1980, na revista The New Yorker. Juntos, constituem um feito artístico monumental, uma das obras de ficção mais corajosas e complexas já escritas sobre o Holocausto. Com prosa lacônica e hipnótica, o conto ''O xale'' decorre num campo de concentração ou, mais exatamente, na consciência de Rosa, uma prisioneira que tenta desesperadamente salvar a vida de sua filha pequena. No segundo conto, ''Rosa'', encontramos a mesma mulher trinta anos depois, vagando por uma Miami surreal, em busca de algo que jamais poderá encontrar - a vida que lhe foi roubada. Essas pequenas obras-primas de Cynthia Ozick foram incluídas na coletânea anual Best American Short Stories e agraciadas com o primeiro lugar na O. Henry Prize Stories. ''O xale'' também foi selecionado por John Updike para a coletânea ''The Best American Short Stories of the Century''.

Rose l''orpheline a dix-huit ans lorsqu''elle entre au service des Mitwisser, une famille d''intellectuels juifs de Berlin exilés dans le Bronx. Déchus, déracinés, tous attendent avec espoir le retour de leur bienfaiteur, l''énigmatique James A''Blair. Rose, spectatrice fascinée des divagations solitaires des uns et des autres, navigue à vue dans cet univers fantasque où les folies et les rêves se frôlent, dans un silence inquiétant, sur le seuil d''un monde vacillant...

Le pédagogue et l''enfant-génie. Une stimulante initiation au "roman juif américain" des années 1980, comme l''écrit Nicole Zand dans ##Le Monde## du 28 février 1986, p. 18. Le héros est un principal d''école primaire de la région de Milwaukee, juif d''origine française, aux ambitions inaccomplies. Dans la lignée d''Isaac Bashevis Singer.

Ruth Puttermesser est une fonctionnaire américaine, placardisée par sa hiérarchie. Pour laver son humiliation, elle crée un golem et, avec son aide, conquiert la mairie de New York. Sa carrière sera de courte durée... et plus dure sera la chute. Mais voici que Puttermesser tombe amoureuse d''un faussaire, ce qui n''est guère surprenant - ne se prend-elle pas elle-même pour George Eliot ? De nouveau, la désillusion succède à l''illusion. Et si Puttermesser se fait un sang d''encre, c''est qu''elle n''est peut-être rien d''autre qu''une créature de papier pour qui seul existe l''imprimé. Entre Kafka et Cervantès, le roman victorien et l''imaginaire juif, Cynthia Ozick invente une mythologie moderne à l''humour dévastateur, une fable sur le pouvoir des mots et la folie de l''écriture.

Consists of the correspondence, manuscripts, and papers of Gordon Lish. Some of the correspondents include: Rick Bass; Ann Beattie; Saul Bellow; Harold Bloom; Paul Bowles; Kay Boyle; T. Coraghessan Boyle; Harold Brodkey; William F. Buckley; Raymond Carver; John Cheever; James Dickey; Joseph Heller; Mary Hemingway; John Irving; Ken Kesey; Stanley Kubrick; Norman Mailer; Arthur Miller; Henry Miller; Vera Nabokov; Richard Nixon; Joyce Carol Oates; Cynthia Ozick; Philip Roth; Susan Sontag; Peter Theroux; Robert Penn Warren; Tom Wolfe.